El término reforma en el ámbito de la educación se ha considerado como un lugar intermedio o de confluencia entre el ámbito de las polÃticas generales, por una parte, y por otro lado, el de las medidas concretas para mejorar aspectos especÃficos de las prácticas. Esta forma de incidir en el sistema educativo nos suele dejar insatisfechos por ambos lados. Por la insuficiencia y falta de ambición de la polÃtica de vuelo rasante que se esconde en las pretendidas virtudes de las reformas y por la incoherencia e ingenuidad de las estrategias para transformar un sistema educativo que tiene una historia y que funciona con una cultura que nos implica.
Esta obra recoge las aportaciones de un grupo de profesionales que, desde su dedicación académica, su experiencia en la polÃtica, la administración y en la práctica pedagógica, iluminan distintos ángulos de lo que representan hoy, y lo que han sido en las últimas décadas, las reformas.
Los análisis que realizan los autores permiten comprender mejor lo que permanece y lo que se pierde y qué es lo esencial y lo accesorio de las polÃticas sobre la educación. De sus aportaciones se desprende la necesidad de que las polÃticas se ocupen de dar respuesta a los problemas que les son propios, que las reformas con vocación de cambiar las prácticas se enfoquen como estrategias de mejora permanente y que esas estrategias sirvan para comunicar y esclarecer problemas, tratando de resolverlos, y no de crearlos.