En 1863 RosalÃa publica " Cantares gallegos " , cuyo prólogo contiene un alegato reivindicativo de Galicia y sus gentes. En cuanto a la intención declarada por RosalÃa, podrÃamos resumirla como el propósito de cantar las bellezas de su tierra, los encantos del paisaje de Galicia y sus gentes, dando a conocer algunas de sus poéticas costumbres, que conservan cierta frescura patriarcal y primitiva, y borrando asà las visiones denigratorias. Un propósito que lleva aparejado el empleo y la defensa de la lengua gallega: mostrar, dice, que nuestro dialecto dulce y melodioso es tan adecuado como el primero para todo tipo de versificación, muy lejos de esa versión degradada de la lengua de la que algunos hacen mofa. Y es que la escritora tenÃa como única pauta la oralidad: su gallego es el que oÃa hablar a su alrededor, lo que imprime a los poemas de RosalÃa esa tan loada naturalidad, sencillez y acierto, o verdad.